Los que me conocen saben que soy más de olas pequeñas. Pero a veces hay que salir de la zona de confort y arriesgar un poco para ver hasta donde puedes llegar, aunque tengas que pasar un poco de miedo para ello...
Me costó mucho decidirme a entrar, le dí un montón de vueltas, ya había dos en al agua, pero las series (para mi) eran demasiado grandes, aunque estaba ordenado y por el canal parecía que se podía remontar sin demasiadas dificultades. Entonces pensé: "Pues lo intento, sino siempre puedo salir con la primera espuma..."
Solo cogí dos de las grandes, de las derechas, de las que quería surfear todo el mundo, pensé que me rompía la tabla en la bajada, estoy seguro que han sido las dos olas más grandes y potentes que he surfeado nunca y no se me olvidaran durante días! Aún me tiemblan las piernas al recordarlo! También me comí una serie que pensé que no salía de allí...Luego me fui a la izquierda, cerca del canal, con olas algo más pequeñas y más tranquilo donde seguí disfrutando de un gran baño…