Antes de irme de la playa el Sábado ya me di cuenta de que
el mar estaba subiendo, había calculado mal y que quizá el día bueno para el madrugón
y para un gran sesión debía de que ser el domingo. Esta vez no me equivoqué.
Llegué y al girar a la izquierda en la primera curva ya la vi. La ola rompía
grande y limpia, nadie en el agua y luz suficiente, aparqué, me cambié lo más rápido
posible y salí corriendo hacia el pico como un loco por miedo a que la marea
subiera muy rápido y me quedara sin sesión. Al final yo solo en al agua
surfeando ola tras ola hasta la orilla, remontando y cogiendo otra y otra y así
sobre una hora, después llegaron 3 personas más y estuvimos otra hora
compartiendo las olas que llegaban de sobra para todos. Cuando me iba y aunque
la marea ya estaba muy alta seguía entrando alguna serie que otra y seguía
llegando gente. Pero para mí ya habiá sido suficiente, estaba más que satisfecho, me acababa de dar el baño del año.
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