¡Y no me extraña! Frio, viento, lluvia, marea muy baja y bajando, pocas olas
y cerronas...normal que nadie se animara con estas condiciones, pero como ya
estaba allí...
Al llegar a la orilla las olas eran tan pequeñas que quité el invento para
practicar un poco, pro pronto me lo tuve que poner de nuevo, a mitad de la sesión
empezaron a llegar buenas olas, eran orilleras y muy rápidas por lo que había
que estar muy atento para no ser engullido por la ola o acabar en la arena. Conclusión:
siempre se puede rascar un bañito divertido siendo un poco positivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario